REFLEXIONES SOBRE


EL NEOLIBERALISMO EN CHILE.
ESTALLIDO SOCIAL Y PROCESO CONSTITUYENTE EN CHILE
TAMBIÉN SE INCLUYE
REFERENCIAS A PUBLICACIONES SOBRE MOVIMIENTOS SOCIALES Y ECONOMÍA POLÍTICA .
INFORMACIÓN SOBRE TRABAJO DE GESTIÓN Y ADMINISTRACIÓN EN INSTITUCIONES Y ORGANIZACIONES SOCIALES
Y
VIDEOTECA SOCIAL (muestra de películas emblemáticas de denuncia social, en los diferentes géneros expresados en la historia del cine)

domingo, 28 de febrero de 2010

LA REVOLUCIÓN PINGUINA





LA REVOLUCION PINGUINA O LA APARICIÓN EN CHILE DE UN MOVIMIENTO SOCIAL DE NUEVO TIPO


1.- RENACE UN MOVIMIENTO.

Concluida la primera década del siglo XXI comienzan a aparecer en nuestro país y el mundo escaramuzas que configuran un movimiento social de nuevo tipo. Algunas de ellas se manifestaron por primera vez en Chile 5 años antes. Sus protagonistas fueron muchachos quinceañeros que se había criado jugando con los computadores.
Si bien los estudiantes se incorporaron a las protestas sociales y todas las acciones colectivas que durante la  dictadura militar provocaron el desenlace democrático, no lo hicieron con un sentido de identidad, por ello podemos decir que  el movimiento estudiantil en Chile desde los años sesenta cuando levantó la consigna de “Universidad para Todos” y provocó la Reforma Universitaria, durmió un lago sueño del cual despertó sólo el año 2006.
La Movilización Estudiantil del 2006 corresponde a una serie de manifestaciones realizadas por estudiantes secundarios en Chile entre Abril y Junio de ese año, reactivadas en Septiembre y Octubre y  el aparecimiento de breves escaramuzas el 2008. La movilización es identificada informalmente como Revolución de los Pingüinos o Revolución Pingüina, debido al tradicional uniforme utilizado por los estudiantes.
Para dimensionar su extensión cuantitativa se destaca  los sobre 100.000 estudiantes de más de cien colegios del país que se encontraban movilizados el viernes 26 de Mayo, antes del Paro Nacional de Estudiantes convocado para el Martes 30, el cual habría contado con una adhesión de más de 600.000 escolares.
Un movimiento se estructura en torno a una respuesta social a carencias valorativas, de intereses o ideológicas. En este caso las demandas levantadas en un comienzo eran por así decirlo simples y de fácil despacho, fue, por ello, la subvaloración de las mismas por parte de la autoridad política, la que permitió que paulatinamente los estudiantes incorporaran otras de mayor calibre y de más difícil  solución, una vez que de los líderes se percataron del potencial desarrollo que llevaba consigo el desarrollo del movimiento.
Sólo con el propósito de acercarme a la revolución pinguina como experiencia movimientista, identifico aquí con la categoría  “movimiento social” a una determinada forma de agruparse de un conglomerado de personas con características identitarias para actuar colectivamente y reclamar lo que ellos creen que son sus derechos.
Para que exista movimiento social debe haber entonces un agrupamiento de personas con características comunes que identifique carencias e injusticias que los afecte como grupo, lo que prefigura la preexistencia de un conflicto con un grado de tensón que el grupo, mediante una acción colectiva, intentará resolver.
Si bien la precondición de la presencia de una experiencia movimientista es la existencia de un conflicto, no todo conflicto desemboca en una acción colectiva que toma la forma de movimiento social, ello ocurre, por ejemplo, cuando otro grupo de personas lo hace visible, le da dimensiones y asume como propia la acción colectiva reivindicativa (un partido político, por ejemplo).


2.- ORÍGENES

Las marchas el año 2006 empezaron por la demanda de una PSU (prueba de selección universitaria) gratuita y el uso del pase escolar los 7 días de la semana y en todo horario cuando estuviera operando el Transantiago. Eran demandas levantadas por el conjunto de estudiantes secundarios, es decir tanto los que estudiaban en establecimientos municipalizados como particulares y subvencionados, por lo cual se soslayaba las odiosas diferencias socioeconómicas que el sistema lleva consigo.
En mayo de 2006, el entonces ministro de Educación, Martin Zilic, partió deslegitimando el movimiento estudiantil y hasta fines de ese mes -cuando el tema ya era un asunto de Estado- seguía diciendo que no dialogaría con los dirigentes de colegios en toma.
“Los llamados a paro y movilizaciones no tienen ninguna razón de ser y responden solamente a hechos de violencia que rechazamos categóricamente”, dijo a mediados de ese mes.
“……el movimiento del 2006 se armó de manera invisible, sin que nadie se esperara que fuera tan tremendo” señalaría meses más tarde en una entrevista su líder más emblemática. (María Jesús Sanhuesa The Clinic http://www.theclinic.cl/2011/06/02/

  
3.- MASIFICACIÓN, RADICALIZACIÓN Y TRANSVERSALIDAD.

Las primeras manifestaciones asociadas al conflicto tienen lugar el 25 de abril con la toma de los liceos C 47 y Carlos Cousiño de Lota  y la primera marcha en las calles de Santiago el día siguiente.
Desde esa fecha y hasta el 16 de Mayo (con la convocatoria al paro nacional) se suceden movilizaciones (marchas, tomas de colegios, jornadas de reflección) a diario en diversos establecimientos a lo largo del país, la demanda estaba reducida a mejoras de infraestructura en algunos colegios, la gratuidad de la PSU, el uso del pase escolar las 24 horas del día los 7 días a la semana, y el mejoramiento de la JEC (jornada escolar completa).
La reacción del Gobierno estuvo a cargo del Ministro de Educación M. Zélic y se redujo a condicionar las conversaciones al término de las movilizaciones. Pocos días después esta postura fue abandonada y el Ministro se abrió a crear mesas de diálogo en cada una de las cuales los involucrados conversaban discutían y negociaban las demandas.
Los primeros días de Mayo se involucran a la búsqueda de solución al conflicto autoridades posicionadas en lugares secundarios y terciarios de los aparatos de gobierno como los subsecretarios y seremis de las carteras y reparticiones involucradas en la solución de las demandas levantadas; educación y transporte en especial, la dirección de presupuesto, y en el menor medida los alcaldes-sostenedores e intendencias, estas últimas abordando temas relacionados con seguridad interior. Algunos lo hacían mandatados por autoridades superiores en las instancias de diálogo que se  fueron sucediendo sin lograr acuerdos aceptables por ambas partes, y otros tomando decisiones o haciendo  declaraciones a título  personal. La falta de liderazgo del Ministro de Educación y la negativa de M. Bachelet de involucrarse en la solución de los problemas hasta esa fecha planteados incidió en la prolongación del conflicto sin avizorar soluciones en el corto plazo.
La confusión aflora en las instancias de gobierno, mientras los liderazgos del movimiento son sorprendidos por la masividad que éste va  alcanzando lo que rebasa todas sus expectativas. Se hace explícita además la aceptación y comprensión expresada  por los apoderados, los profesores y la comunidad en su conjunto.
La masiva participación de estudiantes en las marchas llamadas en diversas regiones, provincias y comunas y en especial  las realizadas el 8 y 10 de mayo en Santiago, así como el inminente apoyo e incorporación a la movilización de universitarios y profesores alientan a los liderazgos a ampliar sus peticiones y demandas.
A mediados de mayo el movimiento había alcanzado un nuevo estadio, las redes sociales habían develado el tremendo poder de convocatoria que poseen cuando se sabe hacer uso de ellas.
Entre la primera marcha convocada en Santiago, el 8 de Mayo y la realización del primer paro el 16 del mismo mes el movimiento se instala en el escenario social y político del país, la presencia de sus dirigentes emerge y se agiganta en los medios. 
Antes del paro del 18 de Mayo  el petitorio de los estudiantes incorporaba entre sus reivindicaciones demandas como gratuidad del pase escolar, mejoramiento y aumento de las becas y gratuidad de la PSU. Los participantes de las manifestaciones generadas  en el marco de la huelga del 18 de Mayo demandaban reforma a la LOCE, (ley orgánica constitucional de enseñanza) término de la municipalización  y mejoramiento de la jornada educacional completa. Demandas que rápidamente fueron rescatadas y adoptadas por la dirigencia del movimiento.
La cuantificación del costo para el gobierno de la extensión del uso del pase escolar y la gratuidad de la PSU había llevado al director del presupuesto a limitar su cobertura y alcance en caso de adoptarse, sentencia que había formulado tanto en los medios de prensa como en las mesas e instancias de diálogo que hasta ese momento habían funcionado. El aparecimiento de una nueva espiral de demandas llevó al Ministro de Hacienda a tomar posiciones personalmente alertando las consecuencias que su aceptación tendría para las finanzas públicas, lo que también ocurrió con el Ministro del interior a propósito a los desórdenes y presencia de encapuchados que hacían su aparición en las marchas y establecimientos ocupados.
Hacia el 20 de Mayo los estudiantes esperan con ansiedad el discurso de la cuenta pública de la nación con los colegios emblemáticos de Santiago tomados. Las principales demandas que exigen los movilizados en tomas son ahora la LOSE, la JEC y la desmunicipalización. Una breve referencia a los encapuchados y una amplia y genérica promesa de mejorar la calidad de la educación fueron las únicas referencias escuchadas. La decepción se traduce en una espiral de nuevas tomas, desalojos y retomas en las que participan sin excepción todos los colegios emblemáticos de la capital.
A esas alturas en las instancias de diálogo se hablaba de una agenda de corto y otra de largo plazo. La prensa informa sobre  existencia de más de 40 colegios tomados en Santiago que acogen más de 70 mil estudiantes, la movilización se expande rápidamente a ciudades como Valparaíso, Iquique, Rancagua y Concepción.  La semana siguiente se había extendido a todo el país y los colegios tomados son más de 200.
La presidenta insiste en mantener distancia frente al conflicto, sólo en los puntos de prensa se refiere tangencialmente a él condenando la violencia, condicionando cualquier gestión para solucionar los temas de fondo a la vuelta a clases y mostrándose partidaria no a mejorar la jornada educacional completa sino a terminarla si los estudiantes consideraban que no está cumpliendo el objetivo de mejorar la calidad de la educación.
La transversalidad política del movimiento se transparentaba en el listado de “parroquias” que reconocían los voceros y dirigentes que por cierto era más extenso que el  listado de organizaciones que reconocía el propio sistema político oficial. Con atribuciones y mandatado para liderar la solución  del conflicto el Ministro de Interior se reúne con  el Secretario General del PC en el momento pic del conflicto para testear posibles reacciones frente a las propuestas de solución que se elaboraban.
El balance emanado de las propias esferas oficialistas durante los primeros días de junio es categórico. Según catastro elaborado por  carabineros el paro se extiende a prácticamente todo el país, 900 colegios y 800.000 estudiantes movilizados, lo que expresa el 80% de la población escolar. Más 100.000 universitarios en tomas, paros y jornadas de reflexión.
Ya no se trataba de una situación de fácil despacho por lo cual el Ministro Secretario Ministerial de Gobierno en una vocería señala que las autoridades se tomarán todo el tiempo que sea necesario para solucionar el conflicto, apelando a perseguir el agotamiento de los movilizados, y, adelantándose a las consecuencias que traería tal decisión, otorga mayor protagonismo de su manejo al Ministro del Interior.
No obstante ello, en una decisión política orientada a evitarle cargar a la presidenta la mochila  de un conflicto en un viaje programado con anterioridad a Estados Unidos, un día después del paro nacional convocado para el 5 de junio, la propia presidenta, en cadena nacional firma un proyecto de ley que es enviado de inmediato al parlamento y contiene las reformas constitucionales requeridas para abordar los temas de fondo. Anuncia también la creación de una comisión amplia con participación estudiantil abocada a inyectarle contenidos a las reformas demandadas a la LOCE, la JEC y la municipalización.
Seis días después la asamblea de la UNES (Unión Nacional de Estudiantes de Santiago), organización que reemplazó a la ACES (Asamblea  Coordinadora de Estudiantes de Santiago) acuerda la entrega de los colegios que aún permanecían en tomas.
El clima para llegar a ello se había generado debido al agotamiento y cansancio que se había instalado en la epidermis los movilizados y el paulatino descuelgue de colegios en paro asociado al mismo fenómeno. Hecho que no pudo revertir el levantamiento de la consigna “ni divididos ni desgastados” que habían pregonado algunos dirigentes en conferencia de prensa el 6 de junio.
Fue mayor el efecto publicitario que provocaron  encuestas elaboradas por diarios de la época que señalaban que si bien más del 67% de la población apoyaba los objetivos de la movilización, alrededor del 61% consideraba que con la propuesta del gobierno éstos se habían alcanzado.


4.-  RESULTADOS Y DESENLACE DEL CONFLICTO.

¿Qué pasó con las demandas corporativas?
En materia de resultados respecto de las demandas corporativas para  analistas y protagonistas no hay una doble lectura. La pobreza que es posible advertir en este tema provocó una decepción manifiesta en quienes asumieron con mayor lucidez sus liderazgos.
La nebulosa en materia de resultados que dejaban los logros asociados al envío al parlamento de un proyecto de ley de reforma constitucional y la creación de un Consejo Asesor Presidencial mandatado para dar sustancia a las reformas prometidas se acentuaba debido a la desconfianza que transparentaban las posturas de las autoridades de gobierno formuladas respecto de los temas tratados en las mesas de negociación que operaron a lo largo de todo el conflicto.
En el Consejo Asesor primero los estudiantes solicitaron participación paritaria, petición que fue rechazada de plano alcanzando finalmente un reducido  17% de representación. Al poco andar los estudiantes se retiraron y sin ellos la comisión fue reformulada acotando su trabajo a las medidas de política educacional que requerían envíos de proyectos de ley al parlamento. La discusión se prolongó primero al interior de la comisión y posteriormente en la cámara  de diputados y senado durante casi dos largos años.
Durante este lapso de tiempo la movilización estudiantil se hace presente de manera “jibarizada” sólo en los meses Agosto y Septiembre de ese año 2006, para posteriormente reducirse a declaraciones y visitas esporádicas y espontáneas  al parlamento cuando los proyectos fueron discutidos y votados en las comisiones y sala.
En cadena nacional M. Bachelet junto al anuncio de medidas como la constitución del Consejo Asesor Presidencial para presentar al Parlamento propuestas y un proyecto de reforma a la LOCE, que detonó el desenlace del conflicto también anunció mejoras en la infraestructura de 520 colegios y reposición del mobiliario en 1200, aumento en medio millón de raciones alimenticias; y subvención familiar en transporte para los más pobres, prácticas técnicas remuneradas, 155 mil becas PSU, y la creación de una superintendencia de educación.
El balance que arroja el seguimiento de estas medidas da para todo, el proyecto que crea la  superintendencia de educación, por ejemplo, al año 2011 aún  se debate en el Parlamento. Lo sucedido con este proyecto refleja la falta de sintonía entre los agentes políticos involucrados en el conflicto y de éstos con los dirigentes sociales:
Mientras la demanda por la desmunicipalización de los colegios estaba asociada al fortalecimiento de la educación pública, la elaboración de este proyecto de ley y el ingreso a su discusión en el Parlamento  refleja  la intención del  Gobierno de mantener y profundizar la privatización de la educación y el empantanamiento de su discusión en la Cámara de Diputados transparenta la voluntad de los legisladores de disminuir la capacidad fiscalizadora del  Estado.
Incluso aquellas medidas que sólo requerían para materializarse decretos gubernamentales tuvieron distinta suerte.
El uso permanente del pase escolar y el pago de un pasaje de valor reducido, como era tradicional, fue incorporado a los convenios que se firmaron con la implementación del Transantiago y sólo beneficiaron a los estudiantes radicados en la capital.
La Jornada Escolar Completa no sufrió modificaciones sustantivas lo cual requirió priorizar para ese propósito el desvío de  recursos para materializar la infraestructura aún requerida.
Comentario aparte merece el seguimiento a los temas de la desmunicipalización y la LOCE, por cuanto con los estudiantes desmovilizados y fuera del Consejo Asesor Presidencial la iniciativa se trasladó a este organismo donde predominaron las ideas conservadoras.
De esta forma, las propuestas ya carentes de los contenidos demandados por los estudiantes fueron terminadas de ser desnaturalizadas durante la discusión en el parlamento donde la iniciativa fue tomada por la derecha y los sectores del ala más reaccionaria de la concertación que eran miembros de las comisiones de educación de ambas cámaras.
Con los estudiantes desmovilizados, el nombramiento y la acción de Yasna Provoste como Ministra de educación, demócrata cristiana con un pasado reciente como presidenta de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Playa Ancha, para  liderar las negociaciones en el parlamento, fue insuficiente para neutralizar la ofensiva de los sectores conservadores que desde dentro y fuera de la concertación bregaron por hacer del nuevo instrumento legal reconocido como LGE, (Ley general de educación), una LOCE maquillada como la denominaron los propios estudiantes, (ver al respecto en acápite siguiente la posición al respecto de uno de los principales partidos de derecha donde militan no pocos ex líderes de la dictadura). Hacia el final de la administración Bachelet, Y. Provoste es destituida por La Cámara de Diputados y su puesto ocupado por M. Jiménez, asistente social y profesora de la Universidad Católica vinculada a la tendencia de “los colorines” de la Democracia Cristiana cuyos líderes posteriormente renunciarán al partido para apoyar la campaña presidencial de Sebastián Piñera.  
Al momento de ser promulgados los cuerpos legales, en Agosto del año 2008, un reducido número colegios (16) son tomados y rápidamente desalojados abortando el interés de sus Centro de Alumnos de retomar la movilización y abortar el sacrilegio. Aún no se daban las condiciones para superar la desmovilización que había provocado el hostigamiento de los alumnos que estudiaban en los colegios que tuvieron una participación protagónica en las escaramuzas del 2006, la persecución, desmoralización y frustración de los dirigentes que aún no abandonaban sus colegios también hicieron su efecto.


5.- LA INSTALACIÓN DE LA EDUCACIÓN COMO TEMA PAÍS.

La incorporación de la educación a la agenda, el debate y la acción política fue quizás el mayor logro de la revolución pinguina.
Baste señalar al respecto que el cuerpo orgánico que norma el reglamento del sistema educativo durante la refundación democrática fue adoptado el día anterior a la entrega del poder del dictador a las nuevas autoridades.
Se mantuvo incólume no obstante que en el curso de los 15 años siguientes pasaron por el ministerio de educación algunos de los líderes más preclaros de la alianza gobernante. Consultados algunos de ellos posteriormente culparán de ello a los enclaves autoritarios persistentes en el Parlamento y a la existencia de otras prioridades.
Fueron los estudiantes en las calles el año 2006 los que generaron al interior de la sociedad civil la fuerza necesaria para pasar por encima de los enclaves autoritarios enquistados en la sociedad política y obligaron a los propios agentes políticos a cambiar las prioridades.
La Reforma de la LOSE pasó de no estar en la agenda de gobierno a cobrar una inusitada presencia, su costo fue la caída de dos ministros.
El contenido del nuevo reglamento que se elaboró y decretó después de una engorrosa discusión al interior del Parlamento, y sin movilización estudiantil, sólo satisfizo a un grupo de autoridades que celebraron el hecho tomados de la mano con un emblemático “saludo de gol” en las dependencias del poder legislativo.
Pero ese no es el punto. Aún así, ese error de cálculo  “la clase política” lo pagará el 2011 ganándose la desconfianza de otros estudiantes que ese año volvieron a tomarse las calles.


6.- UN MOVIMIENTO SOCIAL DE NUEVO TIPO CONSTRUIDO CON LA LÓGICA DEL HIPERVÍNCULO.

Antes de la revolución pinguina un movimiento social se organizaba a partir del levantamiento de un local que lo legitimaba y era algo así como su cédula de identidad, después, se reproducía mecánicamente un  organigrama que consultaba organizaciones de primer, segundo y tercer gado sembradas en la geografía del país. Era una expresión manifiesta de la “lógica del ensamblaje industrial” vigente hasta entonces, heredada desde la propia revolución industrial y formando parte de la epidermis de la cultura occidental y cristiana del siglo XX.
Una lógica que los estudiantes abandonaron para reemplazarla  por lo que he identificado como una “lógica del hipervínculo”. Una lógica donde para plasmar la necesaria comunicación no necesitas trasladarte a lo largo del país por carreteras interminables, porque al golpe de un clic te desplazas desde un escritorio por las carreteras cibernéticas, organizas eventos virtuales y levantas sedes digitalizadas, en tiempo record y costos cercanos a cero si dispones del equipamiento.
Entonces sucede que a los agentes y operadores de las organizaciones sociales la configuración de redes digitalizadas les cambió la vida y la potencialidad de socializar el discurso y la acción se multiplicó por millones en velocidad y extensión.
El país fue gratamente sorprendido cuando en tiempo record se organizaban eventos que acogían a cientos de dirigentes y   marchas callejeras que movilizaban a cientos de miles de personas. Las autoridades observaban atónitas el fenómeno y permanecían cada vez más confundidas.
Se había instalado en Chile lo que los analistas del fenómeno de los indignados movilizados en Madrid y Nueva York cinco años después identificaron con la categoría “movimiento social posmodernista”.
Junto a ello nace una nueva categoría dirigencial.
Aunque las organizaciones tradicionales de primer y segundo grado también jugaron su papel, cambiaron radicalmente su forma de operar. Los centros de alumnos de cada establecimiento adoptaron la asamblea como el instrumento usado mayormente para tomar decisiones. Algo parecido, aunque con auditorios más selectivos, sucede con las tradicionales organizaciones de segundo grado. No por casualidad fue una organización denominada ACES  (Asamblea Coordinadora de Estudiantes de Santiago) la que “la llevó” durante todo el conflicto. Al interior de ellas se legitimaban quienes transparentaban más claridad, lucidez y capacidad de transmisión de las ideas que allí se debatían; y afuera quienes proyectaban  mayormente una  vocación de  relacionador público para transmitir a los medios los acuerdos tomados. No siempre fueron los dirigentes legitimados en las elecciones formales. Nace así, al alero de la dinámica del movimiento, un liderazgo de nuevo tipo que se empodera  al fragor del debate en la asamblea, proyecta  audacia en las calles y transparenta lucidez  en los medios: la vocería


7.- LOS LIDERAZGOS,  MITO Y REALIDAD.

La aparición en el escenario político y social de jóvenes quinceañeros con Jumper y calcetas  la mujeres y chaquetas azul piedra  o buzo los varones sorprendió a medio mundo.
Rápidamente fueron sometidos a una exposición mediática que sus dirigentes sortearon con galanura y elegancia.
El conocimiento de los problemas que enfrentaban, el dominio de las soluciones y demandas que levantaban, la fortaleza de sus convicciones y decisión de defenderlas removió la conciencia del país entero.
Ingresaban a los salones del gobierno y el parlamento a dialogar de igual a igual con las autoridades y demostraban un dominio en el uso del poder de las redes sociales como instrumento de movilización y lucha social como no se conocía hasta ese momento.
En la calle y asambleas, megáfono en mano, con consignas audaces e imaginativas  y encendidos discursos se convertían en magníficos agitadores.
Todo ello deslumbró a la prensa de la época que no tardó en pronosticar para ellos un prominente futuro con líderes. 

7.1.- LOS  LIDERAZGOS TAL COMO FUERON PERCIBIDOS POR LOS MEDIOS.
  
MARÍA JESÚS SANHUEZA (LA JOCHU).
“Su carácter fuerte, actitud desafiante y militancia en el Partido Comunista han hecho que muchos la vean como una futura política de la línea más dura de la izquierda. Su postura fue una de las más radicales de la movilización estudiantil. Cursa segundo medio y es la más joven de los voceros de la Asamblea Coordinadora de Estudiantes Secundarios (ACES). Fue vicepresidenta del Centro de Alumnos del Liceo Carmela Carvajal, además de cheerleader, karateca y campeona infantil de ajedrez”. (Reseña http://www.redlideres.cl/1813/article-73088.html)
En el momento que estalla el movimiento (de 16 años) cursa segundo medio, como presidenta del Centro de Estudiantes del Colegio Carmela Carvajal de Providencia se posiciona como la “vocera del movimiento” visibilizado orgánicamente en la Asamblea de Organizaciones Sociales. Es por cierto la dirigenta más emblemática. Milita en la juventud Comunista.  Durante los dos años siguientes (que le quedan para egresar de la enseñanza media) sigue vinculada al movimiento y aparece públicamente en las esporádicas movilizaciones estudiantiles contra el sistema de transporte Transantiago, y más esporádicamente en el seguimiento de la acción de la “Comisión Presidencial” (sin participación estudiantil) creada para reformar la LOCE, a través de entrevistas dadas a medios de comunicación social. http://www.emol.com/noticias/nacional/2007/04/03
Era la menor, la más conocida, la que salía todos los días en la tele en los tiempos de la movilización pingüina del 2006. Eran los días en que 600 mil escolares salían a la calle, paraban por dos meses y lograban algo que un montón de protestas universitarias no habían hecho: que el gobierno y la prensa los escucharan. Eran los días en que María Jesús -16 años, de jumper- hablaba intensamente y su cara redonda era omnipresente en la tele y en los diarios. http://www.emol.com/noticias/nacional/2007/04/03

JUAN CARLOS HERRERA, APODADO COMANDANTE CONEJO.
Fue uno de los voceros más duros de la masiva protesta que movilizó a escolares de todo el país para conseguir una mejor educación. Fue elegido por los escolares para representarlos en el Consejo Asesor para la calidad de la educación creado por la Presidenta Bachelet. Estudia cuarto medio en el Liceo Valentín Letelier. Y aunque es simpatizante de izquierda, no se define por ningún partido político. Sus compañeros lo describen como distante, disciplinado y cumplidor. http://www.redlideres.cl/1813/article-73088.html)
“no estamos solicitando más recursos sino una reforma integral a la educación” señaló a la prensa cuando salía de una reunión la comisión presidencial para ilustrar la incorporación al petitorio de las llamadas demandas de la agenda de largo plazo.  

JULIO ISAMIT (EL GUATÓN FARANDULERO).
Secretario general del centro de alumnos del Instituto Nacional, se convirtió en una de las figuras más mediáticas del conflicto estudiantil. Se declara de centroderecha, muy cercano a RN, y admira a Joaquín Lavín y Sebastián Piñera. Fue presidente de la Academia de Ciencias Sociales de su colegio y actualmente es miembro del Instituto O’higginiano. Al igual que César Valenzuela, ex vocero de los secundarios, piensa que luego de la gran convocatoria lograda por los escolares, el movimiento debe convertirse en un actor social relevante que participe con sus opiniones en temas importantes de la contingencia chilena. http://www.redlideres.cl/1813/article-73088.html)

KARINA  DELFINO
“Fue una de las dirigentes clave de la mayor protesta estudiantil en décadas. Esta vocera de la Asamblea Coordinadora de Estudiantes Secundarios (Aces) se perfiló como una líder dialogante, de argumentos claros. Alumna de promedio 6.1 en el Liceo 1 Javiera Carrera, fue presidenta del centro de alumnas y el año pasado comenzó a participar en la ACES. Junto a César Valenzuela, fue responsable de que la unificación que lograron los estudiantes el año pasado se consolidara”. http://www.redlideres.cl/1813/article-73088.html) “mesa resolutiva y no sólo para tomar café con galletitas”, demandó golpeando la mesa en la Comisión Presidencial antes de abandonarla

CÉSAR VALENZUELA
Presidente del Centro de Alumnos del Liceo Confederación Suiza, considerado en los medios como  el estratega de los escolares movilizados y uno de sus voceros más emblemáticos. Su participación en la organización estudiantil desde el año 2005 lo legitima  como uno de los líderes más experimentados del movimiento y uno de sus principales responsables. Militante socialista desde los 12 años. Piensa que la organización, la disciplina y la diversidad son las características que le dieron fuerza al movimiento secundario. Pero él mira más allá. En las entrevistas que sostuvo reconoce su  aspiración a convertir el movimiento en un actor social que tenga opinión en otros temas que atañen a la juventud, como la responsabilidad penal juvenil o el aborto.

 MARÍA HUERTA
 “CHICA DE ARMAS TOMAR: María Huerta, quien cursa Cuarto Medio en el Instituto Superior de Comercio, dejó súper clarito por qué le dicen "La Implacable”” (La Cuarta 13/06/2006)
“Queremos mesas resolutivas, y lo que nos están proponiendo es mirarnos a las caras y tomar café” .Fueron sus lapidarias palabras para referirse a la comisión asesora presidencial
Encargada del comité político de la ACES, “Al verla ahí, en un banco del Parque Forestal, sonriente y relajada, cuesta reconocer en ella a la furibunda líder de los estudiantes secundarios que hicieron caer a un ministro de Educación y han puesto en jaque al Gobierno. Se hizo conocida como María Huerta, simplemente. Su nombre de pila es María Carolina, y ella lo encuentra muy largo. Sus amigos y familiares le dicen Maruja o Marujita, pero esto de "la María Huerta" como que le da más fuerza a su imagen”, …. y dureza para demandar a quienes quieran escucharla la desaparición de los colegios particulares pagados”.(El Mercurio 22/06/2006)

 MAXIMILIANO MELLADO.
Presidente del Centro de Alumnos del Liceo Barros Borgoño. “Maximiliano Mellado tiene 17 pepas, cursa tercero medio en el Liceo Manuel Barros Borgoño y fue vocero del movimiento estudiantil que se tomó los colegios de todo el país buscando mejorar la educación. El 2007, en cuarto medio, espera seguir llevando la guaripola, pero ahora convertido en un pingüino Emperador, ya que los demás integrantes del lote dejarán los uniformes para entrar a la enseñanza superior” (La Cuarta 22/11/2006)

GERMÁN WESTHOFF.
Siendo pre militante UDI, logró ganarse el respeto y adhesión de sus compañeros como vocero de la Asamblea Cordinadora de Estudiantes Secundarios, una organización encabezada por escolares de izquierda. Buscador de equilibrios, defendió el carácter gremialista del movimiento escolar y en su partido lo ven como uno de los futuros rostros de la derecha en el país. Es presidente del centro de alumnos del Instituto Nacional, donde fue uno de los impulsores de cambiar las manifestaciones callejeras por un estilo pacífico de tomas con jornadas de reflexión. Quiere estudiar Derecho o Sociología.(www.redlíderes.cl)



7.2.- ¿QUÉ FUE DE ELLOS EN LOS AÑOS POSTERIORES?

Hacia el año 2012 algunos de los dirigentes emblemáticos de la revolución pinguina continúan ligados a la política y a temas sociales. Tienen distintas percepciones de lo que se sacó en limpio, predominando un sentimiento de frustración, pero coinciden en que lograron convertir la educación en un tema que forma parte de la agenda política nacional
La Jochu a fines de 1998 da la prueba de aptitud académica obteniendo un buen puntaje y suficiente para ingresar  a Derecho, (su segunda prioridad) en las universidades tradicionales, pero insuficiente para matricularse en astronomía su primera prioridad. Decide descansar el año siguiente y viaja a Europa donde se vincula con diferentes instituciones vinculadas al movimiento social, en Diciembre  vuelve a dar la prueba obteniendo un puntaje suficiente para estudiar astronomía pero se matricula en Derecho (¿?). No se vincula a las organizaciones estudiantiles de la escuela o la Universidad de Chile, sin cargos en organización alguna participa en las acciones de la revuelta del 2011 como una estudiante más, y aunque es entrevistada en torno al tema por diferentes medios de comunicación lo hace sólo como “observadora”. Aunque forma parte de un grupo de asesoría jurídica parece estar más preocupada del documental que en esos momento filma la televisión holandesa sobre un monje tibetano, una muchacha afgana (protagonista de un atentado suicida) y ella. El rasgo común que se expresa en las múltiples entrevistas que ha otorgado es un sentimiento de frustración por el esfuerzo empeñado y los magros resultados obtenidos.
Julio Isamit lideró durante 4 años los grupos “Chile Siempre” y “Res Pública”,  centros de estudios que pretenden impulsar la formación intelectual de estudiantes de educación superior y escolares. Entrevistado el año 2011 sostiene que dedica “la mitad de su vida” a sus estudios de Derecho en la U. Católica, y la otra mitad a escribir un libro de entrevistas a políticos del país que espera publicar próximamente con un sugerente título: “¿Por qué la política?”. Michelle Bachelet y Ricardo Lagos son algunos de sus entrevistados.
Los ex líderes Karina Delfino  y César Valenzuela  se conocieron durante el movimiento, con 22 años ambos el 2011 llevan seis años de pololeo. Ambos están vinculados al Partido Socialista, donde César es presidente de la juventud y ella integra el comité político. Karina cursa el último año de Sociología en la U. Católica. César, estudia Derecho en la U. Alberto Hurtado y dedica gran parte de su tiempo a las actividades que le demanda su cargo político
Maximiliano Mellado, a los 21 años, el 2011 comparte su tiempo en el día entre sus compromisos como estudiante de periodismo en la Universidad Central  y  su participación en programas de carácter faranduleros donde se ha hecho famoso por sus romances con algunas de las más famosas “niñas de la TV”. Por las noches trabaja como relacionador público en una disco para costearse la universidad.
María Huerta, ex vocera, con posterioridad al año 2006 militó dos años en la Juventud de la Democracia Cristiana pero a los 23 años el 2011 declara haberse desligado del partido y permanecer alejada de la política por “diferencias muy fuerte con todos ellos” e incompatibilidad con sus convicciones frente a la educación. También abandonó la carrera de derecho (“de repente no tienes plata para sacar fotocopias” se lamenta respondiendo a una entrevista). Trabaja en un Hostal de Bellavista para costearse sus estudios de Orientación en Mediación. Interrogada al respecto durante la revuelta del 2011 llama a los pingüinos a sacar la voz asegurando que “son los que tienen las ideas claras”. 
Alejandra Saavedra e Ignacio Bravo dirigentes ambos del Liceo Confederación Suiza; Nicolás Pineda, presidente del Liceo Manuel de Salas, son tres de los dirigentes que lideraron las tomas de 16 colegios de Santiago el año 2008, intentando, sin lograrlo, reflotar el movimiento. La primera de las nombradas en una entrevista a la periodista Beatriz Michel del diario La Nación emite una afirmación emblemática. “Cuando decidimos que teníamos que seguir avanzando, nos dimos cuenta que de lo avanzado el 2006 no quedaba nada entonces había que comenzar todo de nuevo”. (http://aquevedo.wordpress.com)     
María Música Sepúlveda, alumna del Liceo Darío Salas con 14 años y cuatro detenciones en  el cuerpo protagoniza el 6 de Junio del año 2008 el último y más insólito de los episodios vividos por los estudiantes que fueron parte de la generación que emergió entre los años 2006 y 2008: lanzarle un jarro de agua a la ministra. Parodiando el título de un western hollywoodense de la década del 60 me atrevo a decir que ella fue “la última de los mohicanos” de la revolución pinguina. Después de la “marea mediática” que provocó el caso Música fue expulsada del Liceo y reintegrada al sistema educacional sólo después de un largo y engorroso proceso judicial.


7.3.- EL JARRAZO.

Una  de las escenas más patéticas acaecidas en el marco de la llamada revolución pinguina se produce, en sus estertores el año 2008, y la protagonizan una dirigenta estudiantil y la Ministra de Educación que había reemplazado a Yasna Provoste destituida por la Cámara de Diputados.
Aunque es una escena violenta, la violencia no la ejercen en este caso las fuerzas policiales sino una inocente muchacha que responde al romántico nombre de Música.
Invitada Música a un “diálogo” de la ministra con dirigentes y autoridades de establecimientos de educación para explicar los alcances de los proyectos aprobados en el parlamento y otros que aún se discuten, la muchacha decide asistir para enrostrarle a la autoridad el desconocimiento en las leyes  promulgadas y en las que próximamente se promulgarán, de las demandas levantadas por los estudiantes. Alertados o no de sus intenciones los organizadores no le otorgan la palabra a Música no obstante insistir en solicitarla durante todo el evento, al final del cual se acerca al proscenio para encarar a la autoridad pero ésta la ignora y procede a tomar la cartera para retirarse del recinto, momento que Música utiliza para lanzarle un jarro de agua en la cara como una muestra de rabia e impotencia.
“Yo intentaba decirle que de nada sirvió la larga lucha dada por mis compañeros el 2006, pero no fui tomada en cuenta, entonces me acordé de los estudiantes golpeados por carabineros y mojados por guanaco, vi el jarro con agua en el escritorio y se lo tiré” (diario La Tercera, 16 de Julio de 2008)
Será éste el último episodio patético manifestado en la fase de desenlace de la llamada revolución pinguina. Una suerte de “video respuesta” al protagonizado por los honorables parlamentarios algunos meses antes, cuando,  al momento de aprobarse en el parlamento los retoques de maquillaje que la derecha permitió que se le hicieran a La Ley Orgánica de la Enseñanza de Pinochet, los legisladores mayormente involucrados en la operación, la Ministra de Educación, nominada para administrar la solución del conflicto, y otras autoridades  celebran el hecho con las manos tomadas sobre la  cabeza en un tierno, efusivo, sentimental y emblemático “abrazo de gol”.
No obstante estos últimos hechos relatados a modo de anécdotas, no me cabe ninguna duda que la revolución pinguina marcará un antes y un después en el desarrollo del movimiento estudiantil chileno y será considerada un hito sin precedentes en la historia de los movimientos sociales.