El
año 1838, cuando se funda La Falange, el Partido Comunista llevaba 40 años
recorridos en la historia política de Chile. Sus orígenes se remontan al año
1912 cuando se funda el Partido Obrero Socialista de Chile (POSCH). Aún cuando
el nombre de Partido Comunista lo adopta en el año 1922 al incorporarse a la
Internacional Comunista, es importante constatar su nacimiento el año 1912 como
Partido Obrero Socialista de Chile para enfatizar su raigambre obrera por un
lado y su carácter nacional por el otro.
Su
nacimiento como partido en el seno del movimiento obrero transparenta por un
lado su carácter desde su origen como partido de clase identificado con la
defensa de los intereses del movimiento obrero. Por otro lado, al nacer a la
vida política seis años antes de la revolución rusa transparenta desde su
origen su expresión como producto de una realidad nacional auténtica.
El
nombre de Partido Comunista lo adopta el año 1922 al incorporarse a la
Internacional Comunista y postular como objetivo la revolución socialista. El
año 1927 durante la dictadura de Carlos Ibáñez del Campo sufre su primera
clandestinidad que perdurará hasta el año 1931 con la caída de del primer
Gobierno de Ibáñez y el inicio de un período de inestabilidad con gobiernos
encabezados por caudillos que se suceden en el control del poder.
Superada
esta fase de la historia de Chile marcada por la inestabilidad y el caudillismo
el Partido Comunista se abre paso a una política de alianzas amplias
reemplazando el objetivo inmediato de la revolución socialista por la puesta al
día de transformaciones antiimperialistas y antioligárquicas que “creen las bases materiales para desarrollar
la política de masas necesaria para influenciar el desarrollo de una industria
independiente, la democratización de la República y la lucha ulterior por el
socialismo” (Conferencia Nacional Julio de 1933).(5)
3.1.-
La estrategia internacional de los frentes populares.
El
año 1935 en el contexto de la estrategia definida en la llamada “Internacional
Comunista de los Frentes Populares” expresada en: “hacer frente a la ofensiva fascista que
asolaba especialmente Europa, defender la democracia, y crear condiciones para
una futura ofensiva popular que permitiera avanzar hacia el socialismo”; El
Partido Comunista se abocó a la tarea de formar en Chile el Frente Popular
criollo, tarea que cristalizará sus frutos cuando se constituye una
alianza política formada además por el
Partido Socialista, el Partido Radical y
el Partido Demócrata, mas la CTCH, la que el año 1938 ganará la presidencia de
la república con Pedro Aguirre Cerda a la Cabeza.(5)
Aún
cuando el Partido Comunista no se
incorporará plenamente al Gobierno pasará a convertirse por primera vez en una
organización política gravitante de la política chilena, desarrollando a su vez
un gran arraigo de masas. Curiosamente un conglomerado político que recién
hacía su aparición en la escena política La Falange adopta una posición similar
expresándose este episodio en la primera manifestación de confluencia de ambos
partidos. Juntos apoyarán “desde afuera” a los Gobiernos de Pedro Aguirre
Cerda, y el siguiente de Juan Antonio Ríos.
La
muerte de Juan Antonio Ríos impide cumplir su mandato de seis años y la
elección que define su sucesor, el año 1946, con la segunda guerra mundial concluida se da en un contexto internacional
permeado por la guerra fría. De hecho el propio gobierno de Juan Antonio Ríos
recibe sostenidas presiones por romper vínculos con la “cultura comunista” de
parte de Estados Unidos, situación que es fácilmente soslayada por la no
presencia de militantes en cargos importantes de Gobierno. El debate que se da
al interior del Partido Radical por
definir el candidato a Presidente de la República es resuelto con la nominación
de un partidario de la continuación de la obra de sus dos antecesores, Gabriel
González Videla y recibe el entusiasta apoyo del Partido Comunista y el
conjunto de los partidos que conformaban un Frente Popular superado ya por los
episodios que modelan un contexto internacional permeado por la guerra fría
3.2.-
La “ley Maldita”
La
elección es ganada por Gabriel González Videla sin obtener la mayoría absoluta,
la segunda mayoría la obtiene Eduardo Cruz Coke. Preceptos constitucionales
indicaban que de no obtenerse la mayoría absoluta el Congreso Pleno se debe
elegir al Presidente entre las dos primeras mayorías, rescato este episodio por
cuanto en esta oportunidad La Falange, no obstante haber apoyado en las urnas
al candidato que obtiene la segunda mayoría, sus parlamentarios vuelcan sus
votos en favor de Gabriel González Videla apelando al respeto a los códigos de
la tradición republicana.
La
instalación de Gabriel González Videla en la primera magistratura del país es
acompañada de tres ministros comunistas que sólo permanecen en tal calidad por
algunos meses, su salida coincide con la presentación al Congreso de la ley de
defensa permanente de la democracia más conocida como la “ley maldita” en
octubre de 1948.
Esta
ley dispuso la cancelación de la inscripción Partido Progresista Nacional
(nombre que usaban los comunistas en las elecciones) y el Partido Comunista.
Junto a ello, son borrados del registro electoral sus militantes y las personas
sospechosas de participar en dicha organización. Esto significaba que los
regidores, alcaldes, diputados y senadores electos serían inhabilitados y
despojados de sus cargos. El dispositivo legal prohibía toda forma de
organización, reuniones y acción propagandista de sus adherentes y partidarios.
La aplicación práctica de tales disposiciones legales significó un proceso
persecutorio, de encarcelamiento y relegación de sus militantes. (6)
La ley se mantuvo en vigencia hasta Octubre de
1958. Para explicar su puesta en vigencia analistas mencionan tres factores: la
incongruencia que significaba la acción del Partido Comunista en orden a agitar
la acción callejera en contra de las medidas impopulares que el Gobierno debía
aplicar para enfrentar la crisis de los años 30, algunas de las cuales llevaban
la firma de los propios ministros comunistas; las presiones de Estados Unidos
en orden a condicionar los apoyos financieros para enfrentar la crisis a una
alineación del país en la alianza que encabezaba en el contexto de la guerra
fría; y finalmente la amenaza que significaba, para mantener el equilibrio de
poder, el sostenido aumento de las preferencias que había alcanzado del P.C. en
los últimos actos eleccionarios logrando ubicarse, con alrededor de 20% de las
preferencias, en la tercera organización más votada.(7)
En
su discusión en el Parlamento sólo mantuvieron una postura de rechazo de manera
firme y decidida la naciente Falange y el propio Partido Comunista. El resto de
los partidos con presencia en el parlamento dividieron sus votos entre la
aprobación y un tibio rechazo, o la
apoyaron de plano. Finalizado el Gobierno de González Videla La Falange apoya a
quien será su sucesor, el candidato del Partido Agrario Laborista Carlos Ibáñez
del Campo, el que aún cuando en su programa de gobierno considera la derogación
de “la ley maldita”, hará uso de sus disposiciones durante gran parte de su
mandato, y, sólo hacia el final enviará el proyecto de ley que provocará su derogación.
Proyecto de ley que nuevamente es apoyado entusiastamente por los
parlamentarios de la Falange.
Puesto
fuera de la Ley el Partido Comunista, aprovechando la experiencia adquirida en
su primera clandestinidad, y aunque en este caso la represión se aplicó con
mayor dureza; se las arregló para
mantener su presencia, en especial en la sociedad civil y a través de ella
proyectar su influencia. El año 1952 junto a un sector del Partido Socialista,
apoya por primera vez la postulación de Salvador Allende a la presidencia de la
república, y por segunda vez 6 años después, recién derogada “la Ley maldita”,
pero en este caso representando una alianza más estructurada conformada además
por el Partido Socialista y el Partido Nacional. Aunque por segunda vez S.
Allende pierde una elección presidencial, por primera vez la alianza que lo
postura se constituye en una real alternativa de poder al perder por algo más
de 30 mil votos frente al candidato de derecha Jorge Alessandri, al final de
cuyo período presidencial, la derecha se ve obligada a apoyar a última hora al
candidato de la Democracia Cristiana Eduardo Frei Montalva para evitar el
inminente triunfo del Frente de Acción Popular, representado por tercera vez
consecutiva por el propio Salvador Allende
Documentos digitalizados consultados
(5) RESUMEN DE LA HISTORIA DEL PARTIDO COMUNISTA
(7) La ley de defensa permanente da la
democracia o ley maldita